7 trucos infalibles para cultivar tomates hasta el invierno

Cuando llega el otoño las cosechas del verano van tocando a su fin. En el caso de los tomates, uno de los cultivos preferidos por la gran mayoría de los hortelanos, se hace duro pensar que ha de pasar un largo invierno por medio hasta obtener la primera cosecha de la próxima temporada.

Por esto y para alargar al máximo la cosecha de esta temporada, quiero compartir hoy contigo algunos trucos que te permitan disfrutar de los tomates del huerto (en macetas o en terrenos) hasta diciembre incluso en un clima con importantes bajadas de temperaturas nocturnas ya al inicio del otoño, como ocurre en el centro peninsular normalmente, aunque con el cambio climático nunca se sabe, es mejor estar prevenido siempre para otoños demasiado cálidos, demasiado secos o para una repentina caída de las temperaturas sin previo aviso.

Vamos allá con un montón de trucos sencillos para salvar tus tomates este otoño:

TRUCO 1.

Plantar variedades de tomates para el otoño. 

Los tomates de colgar son variedades de tomates poco conocidas y apenas comercializadas, pero que tienen una gran utilidad en los huertos para el autoconsumo. Los tomates de colgar se cosechan en pleno verano antes de que estén completamente maduros y los racimos se cuelgan con cuerdas o ataduras en un lugar fresco y aireado de modo que nos permite disfrutar de tomates durante el otoño y ya entrado el invierno. Estos tomates permanecen frescos y jugosos porque su piel es fina pero resistente y evita que el agua del tomate se evapore al tiempo que evita que se pudra.

Algunas variedades como los tomates negros siberianos son más resistentes a las bajadas de las temperaturas, por lo que maduran mejor y son y muy adecuados para climas fríos. Mi última propuesta, el tomate green zebra, un tomate que se cosecha en verde, ya que no cambia a color rojo cuando madura y que puedes cosechar por tanto con mayor facilidad que otras variedades durante el otoño.

Pero si no sembraste estas variedades en primavera, no desesperes, no es tarde para ti. Apuntalo para la próxima temporada y sigue leyendo otros 6 trucos que sí puedes realizar a principios del otoño, cuando veas que las temperaturas nocturnas han descendido y a los tomates les cuesta madurar.

TRUCO 2.

Despunta las ramas para conseguir la formación de los últimos frutos.

Cuando las temperaturas nocturnas empiezan a bajar a finales del verano, las tomateras disminuyen su crecimiento y se ralentiza la maduración de los frutos. Es el momento de despuntar las ramas con una tijera de podar. Es decir, elimina la parte final de las ramas, llevandote en el corte los racimos de flores que aun no se han transformado en frutos. De esta forma, la planta concentrará toda su energía en los frutos que le quedan a la planta, puesto que ya no tiene que formar frutos nuevos.

TRUCO 3.

Realiza un último abono para tomates.

Te aconsejo realizar este truco junto con el Truco 2. Estamos a finales de temporada y fácilmente habrá pasado tiempo desde el último abonado que realizaste a tus tomateras. Un aporte extra de nutrientes hará que los frutos maduren mejor y que los últimos tomates sean más sabrosos. Selecciona un abono orgánico rico en potasio como el guano o un abono específico para tomates. Los tomates te lo agradecerán y tus últimas ensaladas de la temporada también, ya lo verás.

TRUCO 4.

Utiliza una manta térmica.

Para conseguir que maduren en la mata aunque bajen las temperaturas, sobre todo las nocturnas. Las temperaturas nocturnas, como ya te he comentado detienen el crecimiento de las tomateras. Por tanto, si protegemos las tomateras con mantas térmicas favorecemos que aumente la temperatura varios grados bajo ellas e incluso podemos protegerlas de esa repentina primera helada. Así alargamos el proceso de maduración de los tomates durante más tiempo. Eso sí, acuérdate de retirar la manta durante el día, sobre todo en los días soleados del otoño. Para saber si ha llegado el momento de hacerte con una manta térmica puedes colocar un termómetro de máximas y mínimas en tu terraza o huerto y de esta forma tendrás controlada la bajada nocturna de la temperaturas.

Si quieres saber más sobre las ventajas de las mantas térmicas sobre tus cultivos, sigue el enlace.

TRUCO 5.

Emplea un acolcahdo.

Una capa de piedrecitas (cantos rodados,…) o mejor aún, de paja u hojarasca seca sobre el sustrato. Esta capa de material que colocamos sobre el sustrato se denomina acolchado y tiene una función muy importante sobre tus cultivos. El acolchado acumula la radiación solar durante el día y mantienen el sustrato o el terreno más caliente durante la noche, lo que permite que las plantas continúen desarrollándose, ya que las raíces de las tomateras necesitan calor para ello. además como recompensa, al no pasar la luz hacia el sustrato de la maceta o el terreno de tu huerto, eliminas la competencia de las malas hierbas que puedan salir alrededor de tus tomateras con las lluvias otoñales.

TRUCO 6.

Retira los tutores y extiende las tomateras sobre el suelo.

Extiende las tomateras sobre el suelo del huerto o el sustrato de tus macetas. Si, si cómo lo oyes,… las tomateras aprovechan el calor que desprende la tierra y de esta forma continuarán madurando poco a poco. Eso si, es muy importante que tengas en cuenta que si viene una época de lluvias, los tomates ap

oyados sobre el sustrato podrían pudrirse. Por tanto, te devuelvo al truco anterior (truco 4), coloca un acolchado sobre el sustrato o terreno antes de extender las tomateras sobre el suelo si hay mucha humedad para evitar que se pudran los tomates por un exceso de humedad en el suelo.

TRUCO 7.

Cosecha los últimos tomates verdes.

Cuando a pesar de haber realizado los pasos anteriores, el otoño avance y los tomates no maduran ha  llegado el momento de realizar la última cosecha del año, en verde. Coloca los tomates en el interior de tu casa en una mesa o una caja de fruta bien extendidos sobre esa superficie. Los tomates, aunque te parezca increíble, irán madurando poco a poco, si bien las cualidades de sabor no será igual que los madurados en la mata. Por eso, este es el último paso, para aprovechar los últimos tomates de la temporada.

Y una vez realizado este paso, ahora si o si, es el momento de arrancar tus tomateras y preparar esas macetas o bancales que quedan libres para los cultivos del otoño y el invierno, que igual estabas ya deseando hacer el «cambio de armario» en tu huerto.

 

Ideas para cocinar los últimos tomates del huerto.

Pero como no quiero acabar el artículo de hoy con la ausencia de los tomates, te dejaré varias ideas para disfrutar de tus tomates del huerto durante el invierno, para que no los eches tanto de menos hasta que lleguen los tomates frescos del próximo verano.

Con los últimos tomates maduros del huerto, si resistes la tentación de consumirlos frescos puedes realizar salsa de tomate o conserva de tomate, quizá la opción más clásica. Pero también puedes realizar encurtidos de tomate o deshidratar y secar los tomates en el horno o al sol para irlos añadiendo a tus platos durante el invierno.

Si hablamos de tomates verdes la primer opción que siempre me viene a la cabeza son los «Tomates verdes fritos»… como rezaba el título del libro de Fannie Flagg. Pues llegados a este punto del invierno una alternativa para esos tomates verdes, si no quieres o no tienes paciencia para verlos madurar a la velocidad del caracol, es freírlos directamente según los coseches.

Y otra opción que puede sorprenderte es convertir los tomates en mermelada, la opción más dulce de todas las que te propongo. De este modo estos últimos tomates verdes del huerto acompañarán las tostadas de tus desayunos o meriendas invernales.

Y para que veáis que sí, que efectivamente es posible, aquí os dejamos una foto de los últimos tomates que cosechamos la temporada pasada, en diciembre, cuando la Navidad llamaba ya a nuestra puerta.

¡Feliz y larga cosecha de tomates y buen apetito!

 

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